¿Existe vida fuera de la Tierra? Hasta ahora la respuesta a esta pregunta yace «flotando en el espacio», sin una confirmación oficial. Sin embargo, algunos científicos creen afirmativamente en esta posibilidad. Incluso, un reciente estudio sugiere que la vida en nuestro sistema solar puede haber comenzado en Marte, no en la Tierra.
Las moléculas orgánicas que permitieron que surgiera la vida estaban presentes en Marte hace unos 4.500 millones de años, según sugiere una nueva investigación. Y aunque estos componentes críticos pueden haber llegado a la Tierra casi al mismo tiempo, fue en el Planeta Rojo donde la vida encontró las condiciones más hospitalarias.
La Tierra y Marte son miembros del Sistema Solar interior, que está formado por cuatro planetas rocosos y el cinturón de asteroides. Poco después de su formación, estos planetas terrestres sufrieron un bombardeo brutal cuando un torrente de asteroides cayó sobre el Sistema Solar interior.
Si bien estas rocas se asimilaron en la corteza tanto de la Tierra como de Marte, el movimiento de la tectónica de placas en nuestro mundo natal provocó que estos antiguos meteoros se reciclaran en el interior del planeta. Por el contrario, la superficie de Marte es estacionaria, lo que significa que las rocas que se estrellaron contra el planeta en el pasado distante permanecen en su lugar y pueden estudiarse.
Al analizar 31 meteoritos marcianos, los autores del estudio buscaron responder una serie de preguntas fundamentales sobre su origen. Por ejemplo, hasta ahora los científicos nunca habían determinado si estos antiguos proyectiles procedían del Sistema Solar interior o exterior, o si llevaban material orgánico que podría haber permitido el desarrollo de la vida.
Surgimiento del agua en Marte
Usando mediciones de isótopos de cromo de ultra alta precisión, los investigadores identificaron los meteoritos como condritas carbonáceas del Sistema Solar exterior. Con base en la prevalencia de tales rocas en Marte y el hecho de que el hielo generalmente representa el 10 por ciento de su masa, los autores calcularon que estos antiguos impactos trajeron suficiente agua a Marte para cubrir todo el planeta en 307 metros de agua.
Significativamente, también se sabe que las condritas carbonáceas del Sistema Solar exterior han transportado moléculas orgánicas como los aminoácidos al Sistema Solar interior. Estos compuestos son esenciales para la formación de ADN y es probable que hayan proporcionado las materias primas que permitieron que surgiera la vida.
Martin Bizzarro, autor del estudio, dijo en un comunicado:
«En ese momento, Marte fue bombardeado con asteroides llenos de hielo. Ocurrió en los primeros 100 millones de años de la evolución del planeta.
Otro ángulo interesante es que los asteroides también transportaron moléculas orgánicas que son biológicamente importantes para la vida».
Condiciones de Marte ideales para la vida
Sin embargo, mientras que las condiciones en Marte pueden haber sido ideales para la vida en este momento temprano, no se puede decir lo mismo de la Tierra.
Bizzaro explica:
«Después de este período, sucedió algo catastrófico para la vida potencial en la Tierra.
Se cree que hubo una gigantesca colisión entre la Tierra y otro planeta del tamaño de Marte. Fue una colisión energética que formó el sistema Tierra-Luna y, al mismo tiempo, acabó con toda vida potencial en la Tierra».
En conjunto, estos hallazgos sugieren que la vida probablemente tuvo más posibilidades de prosperar en Marte que en la Tierra durante los años formativos del Sistema Solar interior.
El estudio científico ha sido publicado en la revista Science Advances.