El optimismo no es para menos. Nunca antes se ha podido llegar al Sol porque la superficie del Sol tiene una temperatura de más de 5.500 grados Celsius, pero su atmósfera exterior puede alcanzar los 1,9 millones de grados.
«Esta diferencia de temperatura es un misterio que nadie ha podido resolver», explicó Nicola Fox, científica del proyecto de la Sonda Parker, a National Geographic. En 1869, durante un eclipse solar se observó una línea espectral de color verde que no correspondía a ningún elemento químico conocido y que fue bautizado como Coronio. Su nombre se debe a que hacía una función parecida a la de un halo verde alrededor del Sol. Ahora se conoce que es de hierro y a ese halo se le llama corona, pero para que tenga ese color debería estar 200 veces más caliente que la estrella, señaló El País de España.
La misión pretende hacer entender cómo la energía y el calor se mueven a través de la corona solar y explorar qué es lo que acelera el viento solar y las partículas energéticas solares. Los científicos han buscado estas respuestas por más de 60 años, pero la investigación requiere enviar una sonda a través del calor de 2.500 grados Fahrenheit de la corona.
Hoy en día, esto es finalmente posible con avances de ingeniería térmica de vanguardia que pueden proteger la misión en su viaje peligroso. Parker Solar Probe llevará cuatro suites de instrumentos diseñadas para estudiar campos magnéticos, plasma y partículas energéticas e imaginar el viento solar.
De acuerdo con la revista National Geographic, la misión es posible gracias a un escudo de 12 centímetros de carbono reforzado y fibra de carbono, que mantendrá la zona a salvo del calor. La zona Parker tuvo un costo de 1.200 millones de euros y se espera que la superficie de la sonda se caliente unos 1,400 grados Celsius.
Los cuatro instrumentos científicos a bordo de la nave estudiarán los electrones, los núcleos atómicos cargados, los protones y los átomos de helio de la corona solar, así como los campos magnéticos que genera el astro para aclarar el origen del viento solar y poder predecir tormentas solares peligrosas para la Tierra.
Parker será lanzado el 11 de Agosto y alcanzará el sol el primero de noviembre. La fuerza de gravedad de la estrella es casi 30 veces mayor que la de la Tierra, acelerará la nave hasta los 200 kilómetros por segundo, la mayor velocidad jamás alcanzada por un artefacto espacial.
Crédito imagen: NASA